Argumentos a favor
El miembro informante del bloque Juntos por Entre Ríos, senador Gustavo Vergara (Diamante), sostuvo que la medida representa “una solución que saca a las finanzas de la fatiga en la que están”. Explicó que el stock actual de deuda asciende a unos 700 millones de dólares, en su mayoría provenientes del crédito internacional tomado en 2017 y reestructurado en 2021.
“No estamos hablando de nueva deuda, sino de ordenar la existente para que la provincia pueda cumplir en tiempo y forma con sus obligaciones”, subrayó Vergara, al tiempo que destacó que los excedentes generados se destinarán exclusivamente a obra pública.
Por su parte, la senadora Patricia Díaz (La Paz – Más para Entre Ríos) defendió su voto positivo argumentando que los municipios de su departamento arrastran deudas que limitan su desarrollo. “Con esta herramienta podremos reestructurarla con mejores condiciones, dándole previsibilidad y oxígeno financiero”, señaló, aunque advirtió que el futuro endeudamiento debería ser “en pesos argentinos y bajo condiciones más sostenibles”.
También acompañaron la iniciativa los senadores justicialistas Nancy Miranda, Gladys Domínguez y Juan Pablo Cosso, este último en una posición que sorprendió por su alineamiento previo con el bloque.
Argumentos en contra
En contraposición, el senador Martín Oliva (Uruguay – Más para Entre Ríos) manifestó su rechazo: “No creo que se deba tomar nueva deuda, sí que se tiene que reestructurar. Si nosotros estamos acá, no es porque solamente se va a pagar lo que se debe, estamos autorizando nueva deuda. No estoy para juzgar al Ejecutivo, pero quiero llamar a las cosas como son”.
Del mismo modo, el senador Víctor Sanzberro (Victoria – Más para Entre Ríos) remarcó que el proyecto carece de precisiones sobre cronogramas de vencimiento, tasas de interés, plazos y condiciones de refinanciación. “Sin esta información no podemos saber para qué es esta nueva deuda”, advirtió.
“El proyecto solo habilita más deuda y refleja una falta de planificación. No estoy dispuesto a acompañar una autorización que condiciona el futuro de Entre Ríos”, concluyó Sanzberro.
Una votación atravesada por tensiones
El debate expuso las diferencias dentro del propio peronismo entrerriano. Mientras un sector argumentó la necesidad de brindar herramientas financieras para evitar incumplimientos y sostener la inversión en obra pública, otro grupo advirtió sobre el riesgo de hipotecar el futuro de la provincia en un contexto de caída de ingresos y desfinanciamiento producto de las políticas nacionales.
Con esta sanción, el Ejecutivo provincial queda facultado para avanzar en la renegociación de la deuda externa e interna, así como en la eventual toma de nuevos créditos, en busca de garantizar la sostenibilidad fiscal y la continuidad de su plan de gestión.