La participación de un niño de contextos barriales en el desfile cívico y militar del 9 de julio, en el centro de la ciudad, tiene un impacto significativo en su desarrollo personal y social. Este evento representa no solo una celebración de la identidad nacional, sino también una oportunidad para que los niños se sientan parte de algo más grande, experimentando el orgullo y la pertenencia a su comunidad y a su país.
Por el contrario, si se limita la participación de estos niños a un desfile solo en su barrio, se corre el riesgo de perpetuar un ciclo de exclusión. Aunque el desfile barrial puede ser significativo, no ofrece la misma visibilidad ni la misma conexión con la historia y la cultura nacional que un evento central. Esto puede llevar a que los niños se sientan aislados y menospreciados, sintiendo que sus experiencias y su entorno no tienen valor en comparación con lo que sucede en el centro de la ciudad.
En pleno siglo XXI, en ciudades como Concordia, donde la pobreza puede ser un obstáculo para el desarrollo de los niños, es crucial ofrecerles oportunidades que amplíen sus horizontes. La participación en eventos cívicos y culturales en el centro no solo les brinda una experiencia enriquecedora, sino que también les permite soñar en grande, aspirar a un futuro diferente y sentirse dignos de ser parte activa de la sociedad.
Por lo tanto, es fundamental promover la inclusión y asegurar que todos los niños, sin importar su contexto, tengan la oportunidad de participar en celebraciones cívicas que fortalezcan su sentido de identidad y pertenencia, contribuyendo así a su desarrollo integral y a la construcción de una sociedad más equitativa.
Conjuntamente con sus padres, hermanos a través de sus diferentes actividades que contribuyen al desarrollo local y su pertenencia.
Coach Carmen Trupiano – DNI 14307706
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